Ser niño es estar en la edad donde la maldad aún no existe como tal y la inocencia prevalece, de tal modo que la combinación de ambas vuelve a ésta en una de las etapas más maravillosas de la existencia humana, pues disfrutamos cada momento, cada acción, cada circunstancia. cuando sé es adulto las personas asumen responsabilidades, obligaciones y muchas de las veces estas nos presionan, estresan y aprisionan, mantener el equilibrio entre inocencia y vida adulta es menester para ser feliz y en lo personal opino que la vida no tiene sentido si la felicidad no es el objetivo primordial de todo ser humano y por tanto debe ser el objetivo de toda institución pública.
Mantener el alma de Niño permitirá tener una mejor y más sana sociedad.
Feliciten y festejen a sus niños en casa (incluyase Usted por favor)
¡Feliz día del niño!