El próximo miércoles terminan las campañas que nunca empezaron, las del poder Judicial, elegiremos ministros, magistrados, jueces federales y locales un número importante de cargos que de manera histórica los elegirá por primera vez en México el Pueblo, no son elecciones populares como bien dice Jaime Flores, candidato a Juez Mixto en la boleta amarilla con en el número 09, son elecciones de especialistas, aún y cuando el derecho a votar lo tenemos todos, debemos así, como deber elegir a los mejores perfiles para dejar en ellos la alta responsabilidad de impartir Justicia, esa que los Mexicanos por decadas de manera pública y privada nos hemos quejado que no existe o bien la acusamos de parcial, que favorece solo a unos cuantos empoderados y ricos (como ejemplo en Zacatecas tenemos a Ruben Ibarra agresor sexual de una niña de 4 años y que anda libre por la calle como Juan por su casa) el proceso electoral es por demás importante para México, no es menor y a pesar que los ciudadanos no lograron conocer a la gran mayoría de los candidatos debido a la reglas del juego, a la falta de financiamiento y por que no decirlo a la falta de interés de los propios candidatos. Hablemos de las necesidades de México en materia de justicia y que tipo de personas ocupamos en esos espacios.
México necesita sasear la exigencia ciudadana de justicia, el reclamo permanente del ciudadano de a pie, de que los Juzgados, tribunales y personas están a merced del rico, del delincuente y del Poder del Estado.
México necesita en sus ministros, magistrados y jueces, a gente con capacidad de empatia en cada caso, conocimiento jurídico, conocimiento social y cultural del pueblo.
México necesita que el valor de las personas encargadas de impartir Justicia, este por encima de su propio interés personal o de grupo a pesar de lo que ello conlleva (amedrentamientos, presiones, presiones de Estado e incluso, espero no ser duro actos en contra de su persona o familia, pues el interés general, debe prevalecer siempre por encima del interés individual) es decir, INQUEBRANTABLES a toda costa, pues esa responsabilidad no es para los timoratos, débiles o cobardes.
México necesita que nuestros Juzgadores pasen la prueba del metal, es decir, que no se deslumbren con el lujo, el oro y el billete, pues de ello venimos huyendo desde orígenes de la conquista, y no, no comparto la viveza cultural que se nos atribuye, esa que reza que el que no tranza no avanza, por el contrario, acuso de irresponsabilidad y mugresa absoluta; por qué de mugrosos jueces estamos hasta la madre.
Podría seguir escribiendo de la necesidad popular y de Nación pero la decisión es suya, vaya a la urna y ejercite este nuevo estilo de JUSTICIA, quizá nuestra tarea sea la de mejorar nosotros como pueblo para ser de esta una mejor sociedad, menos dependiente, más participativa, menos patriarcal, más responsable, menos vende-patrias más corresponsables con este México que tanto decimos amar y al que tanto le exigimos.
FB